Esta app “maliciosa”, que estaba disponible para Android, tenía el nombre “Adult Player” y tomaba secretamente fotos de sus usuarios utilizando la cámara frontal de los dispositivos.
Tras tomar la foto de los usuarios que veían videos en el servicio, la aplicación desplegaba un mensaje que exigía pagar una “multa” de cerca de 8500 pesos (500 dólares) la cual tenía que ser pagada por las íctimas para no ser expuestas como aficionados a las películas eróticas.
Este tipo de programas se llaman “Ransomware” ya que intentan extorsionar a quienes las instalan para no exponerlos y dejarlos en ridículo con su familia y compañeros de trabajo.
De acuerdo a la división de seguridad de Intel, este tipo de chantajes electrónicos se han incrementado en un 127% con respecto a 2014 y no se ve para cuando puedan resolverse.
Fuente: Neowin
