Tras una larga conversación para tratar que el uniformado no se llevara la motocicleta al MP, el dueño de ésta mostró todos sus documentos presuntamente en regla, cuando una de las personas que se encontraba ahí decidió echar un vistazo a la unidad con número económico TM-128, descubriendo gran cantidad de latas de cerveza en ésta.
“Esto no tiene nada que ver” declaró el oficial mientras que los testigos llamaban otra unidad para su auxilio.
Tras el fallido intento de calmar los ánimos, el oficial subió a su patrulla y se dio a la fuga a pesar de que una persona se puso enfrente de ésta impidiéndole el paso por lo que estuvo a punto de ser atropellada.
Al emprender la huida, los motociclistas iniciaron la persecución a pie y pidieron ayuda a un policía peñista, el cual no detuvo la unidad, ocasionando el enojo de los testigos.
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