El pasado 16 de julio, el diario chihuahuense El Sol de Parral informó sobre el arranque de la exposición “Espacios de revelación”, de la artista local Jessica Aguirre Porras, integrada por “25 fotografías de paisajes, edificios y bellos atardeceres, entre otras gráficas, captadas por la lente de la joven parralense”, de la cual presentan un retrato, captado el día de la inauguración, usando una blusa negra, sin mangas y escote. Algo, sin embargo, falta en la foto de Jessica Aguirre publicada por dicho periódico: los tatuajes que porta la fotógrafa en brazos y pecho, los cuales fueron eliminados digitalmente.
“La imagen que publicó El Sol de Parral es la idea que ellos tienen de cómo se debe ver una artista parralense –señaló la fotógrafa, en entrevista–. Es irónico, porque como que ellos lo hicieron pensando que no tendría yo nada de qué quejarme, si hasta me pusieron en primera plana de Sociales, a colores y le dieron difusión a la exposición. Pero claro que sí fue desconcertante. Se me hizo una falta de respeto y hasta una burla, porque ¿en serio pensaban que yo no iba a decir nada? ¿Pensaban que les quedaría agradecida? No sé qué pudo haber pasado por la mente del editor o de la persona a la que le pareció adecuado borrarme los tatuajes.”
Jessica es una joven de 24 años, estudiante de Letras Hispánicas en la UAM-Iztapalapa, originaria de Parral pero radicada en el DF desde hace cuatro años y quien desde hace seis hace fotografía.
“Aquí, en Parral, todo el ambiente cultural está desubicado: no hay difusión, las autoridades no tienen visión, no existe una planeación en términos culturales, falta mucho y, de hecho, esa fue una de las razones por las que quise traer la exposición –detalla Jessica–: en mi fantasía, pensé que era una forma de poner mi granito de arena, mi forma de contribuir, porque es necesario que la gente tenga la posibilidad de ver cosas diferentes… quizá eso fue muy pretencioso, pero así lo vi.”
La exposición de la fotógrafa fue inaugurada el 5 de julio en el Centro Cultural Palacio Alvarado (donde duró 15 días), pero la nota en la que se informaba de ella fue publicada por El Sol de Parral hasta el 16 de julio.
– ¿Qué es lo que llevas tatuado en la piel?
– En el brazo izquierdo llevo un pez koi (tatuaje tradicional asiático, emblema de fuerza y valor), y en el pecho tengo unas alas con las iniciales de mis abuelas, difuntas ambas. Esos fueron los tatuajes que aparecían en la foto de El Sol de Parral y que fueron borrados. Y, además, tengo otros dos, que en las fotos no se ven: unas flores en el cuello y una llavecita en el brazo derecho.
– Luego de que en redes sociales denunciaste este hecho, ¿alguien de El Sol de Parral se ha comunicado contigo para darte una explicación u ofrecerte una disculpa?
– No. Sé que se comunicaron con el Colectivo Bulla de Parral, a través del cual se logró hacer la exposición, para pedirles mis datos de contacto, aunque no se han comunicado conmigo. Pero antes de hablar directamente con ellos me gustaría asesorarme con la Comisión Estatal de Derechos Humanos para ver qué procede, para saber qué puedo hacer. También estoy buscando al Consejo Nacional para Prevenir y Erradicar la Discriminación (Conapred), quiero juntar diversas opiniones y asesorías para saber qué es lo más adecuado.
– ¿Tú estás en la idea de presentar una denuncia formal?
– Sí, esa es la idea –afirma la fotógrafa–. Siento que la prensa de Parral siempre ha tenido esta actitud, como si dijeran ‘nosotros tenemos en las manos el poder de la información en Parral desde hace milenios, y una mocosa que viene aquí no va a poder modificar este sistemita’. Supongo que por eso tienen esa actitud.
– ¿Tú, que eres originaria de allá, cómo ves a la prensa de Parral?
– Con lo del narco y todo eso, se ha vuelto una prensa demasiado amarillista. Y eso me parece irónico, porque publican fotos de decapitados y noticias sensacionalistas sobre homicidios, pero a mí me tapan los tatuajes, me los borran, me los tratan de quitar. Eso me hace pensar en el tipo de manipulación que practican los medios de aquí. A partir de esto, la gente me ha empezado a informar de otros casos similares. Un amigo, por ejemplo, hace poco fue víctima de un accidente, y en el periódico salió una nota diciendo que había asesinado a alguien. Y eso era absolutamente falso, nadie perdió la vida en el accidente que él sufrió. ¿En qué más no practicarán este mismo tipo de manipulaciones?
Para conocer la postura de El Sol de Parral, el pasado viernes Animal Político solicitó una entrevista con algún representante de dicha publicación. Sin embargo, telefónicamente, personal de este medio aclaró que “estamos investigando a ver qué hay de todo ese asunto, para poder tener los elementos necesarios y poder declarar algo”.
– ¿Es decir que, hasta ahorita, no saben por qué le borraron los tatuajes a la fotógrafa Jessica Aguirre?
- Mmmm… sí sabemos –fue la respuesta–, lo que le estoy explicando es que estamos investigando lo de la denuncia que ella va a hacer. Es por eso que nos hemos reservado para declarar algo, hasta el momento. Estamos en eso, en la investigación, aquí tenemos sus datos y (cuando se defina una postura oficial del medio) con gusto le haremos una llamadita”.
La llamada no llegó.
Con información de Animal Político
