Adam Nyhan, ex auxiliar legislativo de uno de los miembros del Congreso de EE.UU. y abogado de profesión, sostiene que no había nada sorprendente en su "lenta reacción", dado que el jefe de Gabinete de la Casa Blanca tan solo susurró a la oreja de Bush una información privada de detalles y no urgió al presidente a cesar y abandonar la comparecencia, informa el portal Slate.com.
Alguien que quiere urgir algo a un alto funcionario que está dando una recepción o comparecencia ante el público nunca elegiría la manera de comunicar la noticia de la forma como lo hizo Andrew Card, según describe el portal la opinión del ex auxiliar.
Asimismo, el periodista estadounidense Bill Sammon, subrayó en su libro que el presidente vio el letrero que mantenía en sus manos su secretario de prensa, tratando de decirle: "No digas nada más".
Mientras tanto, el excongresista de EE.UU. Ron Paulsugirió que el Gobierno de su país tenía conocimiento previo de los ataques terroristas del 11-S y mantuvo esta información oculta en una sección clasificada del informe de la Comisión 9/11.
"Creo que si alguna vez obtenemos toda la verdad (sobre los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001) vamos a descubrir que nuestro gobierno tenía en los registros cuáles exactamente eran los planes (de los terroristas), o al menos algo acerca de esto", dijo Paul.
Con información de RT