El daño al que se considera patrimonio de los acapulqueños se registró en la tarde del lunes, tras el triunfo del equipo mexicano sobre la selección de Croacia y cuando decenas de personas eufóricas se subieron a la glorieta.
Tras el partido, poco a poco fueron llegando los fanáticos que salieron de bares, restaurantes y plazas comerciales, portando banderas y ropa alusiva a la selección tricolor. Incluso se vio a políticos en el lugar como el secretario general del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Guerrero, Evodio Velázquez Aguirre.
A pesar de ser un punto de concentración y de que en festejos anteriores ya habían roto la parte superior del arco de la estatua de bronce, en esta ocasión no hubo ningún tipo de seguridad en los alrededores de la glorieta donde estaba la estatua, pues ya no le corresponde al gobierno de Acapulco, sino al Mando Único de seguridad dependiente del gobierno de Guerrero.
Los vándalos que causaron los destrozos en la glorieta de La Diana iban en estado de ebriedad, explicaron algunos testigos que prefirieron no subirse al monumento ubicado en el llamado corazón de la zona Dorada del puerto.
Algunos funcionarios del gobierno estatal informaron a través de las redes sociales que las cámaras del Centro de Control, Comando y Cómputo (C-4) que disparaban hacia donde estaba el festejo, tienen captados los rostros de los que provocaron los daños a la Diana Cazadora, en su mayoría jóvenes.
Además diversos portales de noticias online subieron fotografías en las que se aprecia a decenas de personas posando con la estatua recargada sobre su costado derecho. Aunque no se muestra el momento y los responsables de los daños.
Tras los desmanes, personal del ayuntamiento acudió a la glorieta de La Diana y colocó sobre su base la estatua de bronce, aunque no se dio a conocer si será retirada para algún tipo de restauración.
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