Los jóvenes, vestidos en camisas blancas manchadas con tinta roja, se han cubierto el rostro con bolsas negras. La protesta ha tenido lugar cuando se cumplen dos meses del momento del crimen y sirve como muestra de solidaridad con la ciudadanía mexicana, que sigue exigiendo que los jóvenes secuestrados sean devueltos con vida.
Con información de RT