El pleito judicial entre el semanario local "Luces del Siglo" y el gobierno de Quintana Roo, por las más de 40 clonaciones digitales e impresas de la revista, hechos imputados al gobernador del estado, Roberto Borge, escaló hoy luego de que el titular de la Unidad del Vocero, Rangel Rosado, acusó a los propietarios de la publicación semanal de presuntamente "auto-clonarse".
En contraparte, el director general de la revista, editada en Cancún, Agustín Ambriz, rechazó los señalamientos del vocero gubernamental, los cuales calificó como "una vacilada" y dijo que el gobierno intenta desviar la atención del problema de fondo, que es el ataque a un medio de comunicación, con recursos públicos, debido a la negativa del semanario a "vender" su línea editorial a cambio de un convenio publicitario.
"Vamos a demandar al vocero por estas acusaciones sin fundamento. Luces del Siglo ejerce un periodismo serio y bien fundamentado. Vamos a demandarlo, para que compruebe que se trata de una autoclonación y una extorsión, como dice", anunció el también periodista.
Esta mañana, el vocero del gobierno estatal declaró a MVS Noticias, conducido por la periodista Carmen Aristegui, que "Luces del Siglo" se auto-clona, presuntamente, para extorsionar al gobierno del estado y recuperar los convenios de publicidad oficial que poseía en el anterior sexenio.
En entrevista, Rosado sostuvo su dicho y expresó que la revista semanal editada en Cancún recibía del gobierno local más de un millón de pesos por concepto de publicidad oficial. El dinero salía -dijo- de la Unidad del Vocero, independientemente de los montos convenidos con otras dependencias gubernamentales, incluidos varios municipios.
"Pensamos que es una autoclonación para victimizarse, ejercer presión y obtener recursos públicos. Con la pasada administración recibían más de un millón de pesos por concepto de publicidad, pero después del Plan de Ahorro implementado por el actual gobierno, se redujo ese monto. Consideramos excesiva esa cantidad para un semanario, que no se trata de un diario", dijo el vocero del gobierno estatal.
En ese entendido, consideró que la demanda de amparo iniciada en contra de Borge Angulo -acusado de ordenar por escrito o verbalmente, la clonación, distribución, difusión y circulación de los ejemplares falsos de "Luces del Siglo"- no persigue denunciar la violación a la Libertad de Expresión sino presuntamente "chantajear" al gobierno estatal y afectar la imagen del Ejecutivo estatal.
Por separado, el director de "Luces del Siglo", Agustín Ambriz, dijo a este diario que nunca han negado que mediase un convenio publicitario con el gobierno estatal "como lo tienen todos los medios en Quintana Roo" y denunció que para mantenerlo, el propio Rosado intentó condicionar la línea editorial de la revista para que sólo publicaran noticias favorables al gobernador, Roberto Angulo, omitiendo los textos críticos.
"Cuando comenzaron los ataques, le pregunté directamente al titular de Unidad de Vocero que qué es lo que quería el gobernador para parar esto y él me respondió que el gobernador quería que nos pusiéramos rodilleras. Nosotros evidentemente nos negamos y los resultados están a la vista de todos", expresó.
Ambriz negó que el monto del convenio fuese de un millón de pesos y dijo que ascendía a 300 mil pesos mensuales. Aceptó que dependencias del gobierno estatal y municipios contrataron publicidad, pero "no impunidad, ni silencio".
También mencionó que hay municipios que siguen debiéndoles dinero por la publicidad contratada -Othon P. Blanco, Solidaridad y Cozumel- lo mismo que algunos organismos estatales, como la Comisión de Derechos Humanos.
"Es verdad que teníamos convenios con dependencias y con municipios, para difundir publicidad oficial, pero de ninguna manera para matizar el contenido crítico de la revista. Eso no es un delito, ni una falta ética.
"Lo que quería y quiere el gobernador y su vocero, es que la línea editorial se ajustara a lo que ellos querían; creo que están confundiendo, porque una cosa es que el convenio ampare la publicación de la publicidad, en la que pueden decir lo que quieran y otra muy diferente a que el convenio sea una mordaza o que a través de éste, se omita la verdad, la crítica fundamentada. Los convenios de publicidad no son convenios de protección oficial", subrayó el también periodista.
Añadió que durante la pasada administración -representada entonces por Félix González Canto, actual senador- efectivamente hubo convenios de publicidad, "pero también hubo crítica. Sacamos diferentes números criticando acciones de gobierno; pero llegó Beto y su vocero pidió, literalmente, que nos pusiéramos rodilleras, ya imaginarán para qué".
Con información de El Universal
